“…Haberles encontrado allí, en ese, su
lugar especial, le destrozó el corazón en instantes, no podía entender la
traición del motivo de sus alegrías; con los ojos ahogados en lágrimas no le
quedo más nada que huir, corrió sin mirar atrás, buscando la senda perdida,
suplicándole a Dios con fervor no volver a cruzar en su
vida, persona como ese ladrón,
que esta vez le robó la
sonrisa…”
Gracias por
leerme. Dios te bendiga. Cuídate, cuida de tus amig@s y familiares…. Esta
ciudad es ficticia, la tuya es real…
Me robó algo más que la sonrisa...;(
ResponderBorrarMe robó algo más que la sonrisa...;(
ResponderBorrarMalvado ladrón, eso no se hace...
ResponderBorrarAmiga, en unas horas publicare la continuación (2da parte) del relato "Secuestro Express" debo advertirte que tiene tercera parte... espero que los disfrutes.
Gracias por leerme.
Que estés bien.
Intensa...
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